Entre el final de la legislatura pasada y el comienzo de la presente, la biografía de algunos parlamentarios ha sido modificada. Algunos títulos se han añadido y otros no aparecen.

El caso del máster de Cristina Cifuentes en la Universidad Rey Juan Carlos —destapado por ‘eldiario.es’ el pasado 21 de marzo y rematado por El Confidencial el 4 de abril— ha abierto la veda al escrutinio público de los currículos de nuestros representantes políticos. Ante la polvareda levantada, políticos como Javier Maroto se han apresurado a rectificar su biografía laboral: en su caso, un curso que aparecía equívocamente como máster en la web del Partido Popular.

Precisamente esta semana, el PP ha propuesto que la comisión del Estatuto del Diputado del Congreso compruebe la veracidad de los currículos de los diputados e incluso pueda sancionar a aquellos que mientan en su historial.

De los 350 miembros actuales del Congreso de los Diputados, solo 135 repitieron en la legislatura anterior, lo que nos permite comparar los CV de estos congresistas, recogidos en la web de la institución, con los que presentaron en la legislatura anterior, también presentes en el portal de la institución. Gracias al hecho de que todos están almacenados en archivos digitales como la base de datos Wayback Machine, de archive.org, hemos podido comprobar también los eventuales cambios intermedios. Ya que no están obligados a hacer públicos los documentos acreditativos de sus títulos, la fe en lo que publican a través de la Cámara Baja es la única forma de comprobar dónde se formaron sus señorías.

El PP ha propuesto comprobar la veracidad de los currículos de los diputados e incluso poder sancionar a aquellos que mientan

En la gran mayoría de los casos, los currículos coinciden —la X Legislatura concluyó en octubre de 2015 y la XII arrancó en julio de 2016—, pero para alrededor de una quincena de diputados, sus credenciales académicas evidencian algunas diferencias: carreras que cambian de título o cursos de posgrado que aparecían y que ahora no se reflejan.

Un MBA en el Gobierno

El partido con más diplomas en estas circunstancias es el Partido Popular, con ocho parlamentarios. Entre ellos, nombres como el de Jorge Moragas, el colaborador más cercano del presidente Rajoy y actual embajador español en la ONU. Moragas, en la X Legislatura, mostraba en su CV un título de máster del Centro de Estudios Internacionales de Barcelona que hoy no aparece en su biografía. «Jorge Moragas estudió en 1990-1991 en el CEI de Barcelona el curso de preparación para acceso a la carrera diplomática cumplimentando los contenidos académicos», explican desde el PP y, recalcan: «Con asistencia presencial a todas las clases, ejercicios prácticos y conferencias correspondientes».

¿Por qué no está ahora en su currículo? El citado curso era producto de un consorcio entre el centro, la Universidad de Barcelona y el Ministerio de Asuntos Exteriores. «En esos momentos, ese curso recibía también la denominación habitual de máster», añaden estas mismas fuentes. «Posteriormente, el CEI amplió su oferta académica con un máster sobre diplomacia pública distinto al curso anteriormente mencionado y el diputado Jorge Moragas actualizó su currículo omitiendo ese máster por no corresponder con su denominación actual».

Desde el PP explican, por si acaso, que Moragas tuvo una «asistencia presencial a todas las clases, ejercicios prácticos y conferencias»

En los casos de la diputada Isabel María Borrego Cortés, con un título de posgrado en Derecho Inmobiliario, o el diputado canario Guillermo Mariscal Anaya, con un máster en Negocio y Derecho de la Energía por el Instituto Superior de Energía que antes sí aparecían, el partido afirma que es por «abreviar y simplificar». Borrego «ha decidido poner la licenciatura por simplificar currículo», mientras que Mariscal «no lo ha incluido por abreviar y simplificar. De hecho, ha realizado más cursos que no ha puesto».

El caso del diputado Eloy Suárez Lamata, con dos másteres en la pasada Legislatura, uno en Gestión Pública por el IESE y otro en Contabilidad y Auditoría por la Universidad de Zaragoza, su alma máter y donde según la web del ayuntamiento realizó un máster en Derecho Agrario que no se refleja en su CV del Congreso, se explica así: «Ha actualizado su currículo».

Lo mismo ocurre con Tomás Burgos, cuya última biografía en la web del Congreso omite todos los títulos que sí aparecían en la anterior, como una licenciatura en Medicina y Cirugía por la Universidad de Valladolid, un diploma «en Dirección de Instituciones Sanitarias por el IESE, Instituto de Empresa y Esade«, y finalmente un máster ejecutivo en Gestión Sanitaria expedido por la Universidad Antonio de Nebrija.

Ana Pastor, exministra y actual presidenta del Congreso, en la pasada legislatura mostraba un MBA (acrónimo del inglés ‘Master in Business Administration’) que en la última versión de su currículo no aparece. Este título figura también en su perfil en la página del partido. Según nos explican desde su gabinete, «hizo ese MBA en la escuela de negocios de lo que era la antigua Caixa Vigo y luego otros dos másteres relacionados con gestión sanitaria en otras instituciones». ¿Por qué entonces no aparece en la última versión de su biografía? «Para esta legislatura se optó por algo muy sintético, solo hay información de sus estudios de Medicina y sus cargos, ni siquiera todos, solo los más relevantes».

Los títulos de la oposición

El resto de partidos también cuenta con políticos que en su día hicieron mención a algún tipo de formación que ahora no se refleja. Tras el PP, el grupo parlamentario que cuenta con más representantes es el PSOE, con cuatro. Desde Ferraz dan con la explicación para todos estos casos. Pedro José Muñoz González, por ejemplo, dejó de registrar el nombre de la ‘Escuela Práctica Jurídica Universidad Complutense de Madrid’, donde obtuvo la licenciatura en Derecho al actualizar la web para la legislatura actual. Diferente es el caso de Elvira Ramón Utrabo. La diputada granadina aparece ahora con un título, el de licenciatura en Ciencias Políticas, que no tenía hace dos cursos políticos, por la sencilla razón, aseguran los socialistas, de que acabó la carrera en ese espacio de tiempo.

Además de estos, el carismático portavoz de Ciudadanos Toni Cantó omitió en la última versión de su biografía la categoría de «pedagogo», que sí aparecía en la de la legislatura previa. En una entrevista concedida en 2013 a la revista ‘Jot Down’, Cantó ya justificaba esta circunstancia: «Soy profesor de teatro desde hace mucho tiempo, pero no tengo la carrera oficial de Magisterio de Teatro». Como explica un portavoz de la formación naranja a este periódico, «figuraba esta experiencia como ‘pedagogo’, sin referirse en ningún caso a la licenciatura. Las biografías de los diputados se editan en ocasiones para actualizarlas, o por motivos de espacio».

Hay también dos representantes del Grupo Mixto: Carlos Salvador Armendáriz, diputado de Unión del Pueblo Navarro que dejó de mencionar un máster en Derecho de Empresa por la Universidad de Navarra entre ambas legislaturas, y Feliu-Joan Guillaumes i Ràfols, del PDeCAT.

El parlamentario catalán ya fue protagonista en abril de 2017, cuando omitió en su ficha que era diplomado en Defensa Nacional. A día de hoy, este título sigue sin aparecer, pero a cambio Guillaumes ha incluido un máster para Funcionarios Directivos de la Generalitat de Catalunya y «stages’ de estudios en Francia y USA».

Fuente: www.elconfidencial.com

 

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